El abrillantador para el lavavajillas es uno de esos elementos que todo el mundo sabe que existe, pero al que -generalmente- no se le reconoce la importancia que tiene a la hora de obtener un resultado sobresaliente con cualquier ciclo de lavado. Aunque hay varias tecnologías avanzadas que cumplen una función parecida, mantener el depósito lleno o utilizar pastillas de detergente que ya lo incluyan es fundamental.
¿Para qué sirve el abrillantador del lavavajillas?
Si te hablamos de que cumple una función crucial, habrá que explicar también con claridad para qué sirve el abrillantador del lavavajillas. Y la respuesta es bastante sencilla: para evitar que la vajilla, los vasos y cubiertos salgan con manchas de agua o de detergente. Igual que la sal (que en su caso combate los problemas derivados de la cal en las zonas de agua muy dura), el abrillantador para lavavajillas, un producto a menudo infravalorado, juega un papel crucial para que puedas presumir de piezas impecables. De su presencia en el compartimento correspondiente depende en gran medida que todas ellas luzcan más tiempo como el primer día.
¿Se puede utilizar abrillantador de lavavajillas casero?
Aunque parece evidente, es importante remarcar que un abrillantador para lavavajillas casero no es nada recomendable. Lo único que puedes conseguir son daños en los conductos del electrodoméstico, manchas en su esmaltado o contratiempos de naturaleza parecida. Como alternativa a los abrillantadores autorizados, a veces se opta, por ejemplo, por el vinagre blanco. Es cierto que tiene un poder de limpieza importante, pero no es para nada compatible con un lavavajillas. Confía únicamente en las marcas recomendadas por los fabricantes y evitarás disgustos.
¿Dónde poner el abrillantador en el lavavajillas?
Es otra de las preguntas más habituales, aunque por fortuna la respuesta y el procedimiento tampoco es complejo. Cuando sea necesario rellenar el depósito del abrillantador para lavavajillas, te avisará -si quieres- el propio electrodoméstico. Aunque también es muy probablemente que tú también te percates por adelantado, ya que las piezas de cristal suelen ser unas grandes delatoras. En cualquier caso: en los lavavajillas Siemens el abrillantador lo tienes que depositar a través de una lengüeta ubicada justo al lado del hueco de la pastilla de detergente. Sigue estos sencillos pasos:
1. Presiona y levanta la propia lengüeta.
2. Llena con abrillantador hasta la marca de llenado máximo.
3. Solo si ha rebosado, limpia los restos para que no se forme un exceso de espuma la próxima vez que vayas a utilizarlo.
4. Cierra la tapa.
Si lo necesitas puedes desconectar el aviso del abrillantador
Una de las opciones más populares a la hora de utilizar el lavavajillas es recurrir a las pastillas de detergente que ya incluyen sal y abrillantador. Son muy prácticas porque eliminan de tu lista de preocupaciones todo lo relacionado con ambos productos. Si es tu caso, cuentas con la posibilidad de desconectar el piloto que te avisa de la falta de abrillantador. Solo hay que seguir las instrucciones del correspondiente manual.
No obstante, si vives en zona de alta dureza del agua (hablamos de 3,7 mmol/l o más) desde Siemens te aconsejamos que, aunque uses pastillas todo en uno, siempre tengas a punto los depósitos de sal y abrillantador. No te preocupes por el consumo: el lavavajillas puede detectar la cantidad que hay en la pastilla y utilizar de los depósitos solo la cantidad imprescindible.
¿Las Zeolitas sustituyen el papel del abrillantador?
No, las Zeolitas y el abrillantador tienen un papel complementario, aunque ciertamente similar. El abrillantador es clave para obtener, tal y como indica su nombre, un brillo perfecto. Las Zeolitas, por su parte, contribuyen a un secado seguro y eficiente. Y es que se trata de una innovadora tecnología que reduce al máximo el vapor residual, secando a baja temperatura y haciendo más agradable la descarga. Incluso optimizan el consumo energético porque se regeneran ellas solas después de cada uso.
¿Podemos sumar algo más a la acción de las Zeolitas y el abrillantador? Con Siemens, sí. Sabemos que las piezas de cristal son un preciado elemento que precisa de un cuidado extremo. Por eso hemos creado glassZone, compuesto de seis boquillas de pulverización integradas en la cesta superior. Gracias a ellas se consigue un suministro de agua continuo pero suave en el interior del vaso o copa, permitiendo una limpieza más a fondo sin peligro de rotura para el cristal
¿Conocías el papel tan importante que tiene el abrillantador en el lavavajillas? ¿Te queda alguna duda sobre su uso cotidiano? Recuerda que estamos a tu disposición para ayudarte en el momento que lo necesites: utilizar el chat de nuestra web o contacta a través del 976 305 714.