Tipos de cocina

Las cocinas en forma de U son la elección perfecta para aquellos que buscan funcionalidad y aprovechar al máximo el espacio disponible. En ellas se emplean las tres paredes contiguas de la cocina, dejando la cuarta abierta de tránsito. Una distribución eficiente con zonas claramente definidas y una amplia superficie para la preparación y organización de los alimentos y utensilios.

Sin duda, la distribución más extendida. Estas cocinas se instalan a lo largo de dos paredes adyacentes formando una L, tal y como su nombre indica. Altamente funcionales aportan una fluidez visual, tanto en espacios grandes como pequeños. Permiten liberar espacio en el centro para completarlo con una buena zona comedor.

La distribución en línea se caracteriza por colocar en una sola linea todos los elementos formando una línea continua. Esta distribución no es la más óptima ya que, al disponerse en un mismo bloque todos los elementos principales, perdemos el triángulo de trabajo. No obstante, tiene también su lado positivo. Esta configuración de cocina es ideal para espacios estrechos o alargados, ya que aprovecha al máximo el espacio disponible.

Las cocinas abiertas con isla eliminan las barreras que tradicionalmente separaban la cocina del salón, creando un espacio central que convierte la cocina en el corazón de la casa. Además de servir como punto focal estético, las islas de cocina ofrecen funcionalidad, son un lugar fantástico para preparar alimentos, trabajar o recibir a invitados.

¿Quieres diseñar una cocina pero no sabes cómo empezar? Es importante decidir cómo distribuir los electrodomésticos para aprovechar todo su potencial. Sigue estos pasos para crear la cocina que siempre has soñado.